Hay algo que el universo está tratando de decirme a gritos, ya que los susurros y el volumen normal no cumplieron su cometido...No consigo descifrar qué es...Ritmo frenético genera situaciones muy diversas y el tiempo para asimilarlas es igual de frenético...Confusión, emoción, tristeza, añoranza...Elaboro una lista de hipotéticos mensajes:
1. No des nada por establecido porque todo cambia de un minuto a otro, incluso entre segundos. Nunca el "Panta Rei" tuvo tanta fuerza. Curioso que mi primera obra de teatro escrita se titulara así...
2. Las rachas no son buenas o malas. En realidad, la palabra racha es absurda. No existe como tal. Están los hechos acontecidos, que pueden ser positivos o negativos y la mezcla entre ellos es lo que configura la vida tal y como la conocemos.
3. Por mucho que desees algo, no va a suceder porque sí. Odio el "ya vendrá cuando tenga que venir", pero supongo que es así y si no lo es...pues no sé...
4. Eso es...no sé nada de nada y no entiendo nada de nada...
5. No creas que las cosas tienen que sucederte porque te lo merezcas porque eso es una soberana tontería...Actúa como quieras hacerlo, pero no pienses que la consecuencia de ello será una recompensa del universo.
6. No esperes nada de nadie ni de ninguna situación...
7. Soñar o hacerte falsas expectativas de las cosas solo te generará malestar y frustración y es una de las raíces de la tristeza. Aunque en el momento concreto soñar sea bonito y te ayude a aislarte del mundo real, a la larga, es peor la cura que la enfermedad.
8. Este es el mundo en el que vives, aunque no te guste. Puedes contribuir a cambiarlo un poco, no el mundo a gran escala, sino tu mundo...Con sonrisas, con actitud positiva, con amigos y gente que te ayude, con aceptación y generosidad, pero evadirte y pensar que estás donde no estás no ayuda, para nada. Ah, y no olvides que todo lo que hagas debe ser altruista...No pienses nunca en que como tú te portaste bien, el otro o el mundo deba portarse bien. ERROR.
9. No por ello hay que dejar de perseguir los sueños, para nada, ni las ilusiones. Están ahí para que sigan floreciendo, pero hay que intentar ser realista y luchar por ellas, no pensar que se van a dar solas.
10. Las situaciones de felicidad plena no son eternas, son breves. La vida cambia, muta, transita. Todas las personas que pasan por tu vida no siempre van a estar; algunas permanecen, otras se van. No hay que ponerse triste. Hay que saber soltar amarras, aprender a desapegarse. Extrañar esas situaciones puede ser reconfortante a veces, pero el éxito está en saber qué sucedió en mí para que esa situación fuera tan placentera. El cambio en uno, no en el exterior ni en los demás. La paz...
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